Hawking, quien falleció recientemente a los 76 años, ofreció una entrevista a la BBC en el 2014 dejando allí uno de sus comentarios más actualizados acerca de la inteligencia artificial. El científico británico afirmó que el desarrollo de una inteligencia artificial completa podría llegar a significar el fin de la especie humana, una sentencia bastante alarmante, así como drástica.
Aunque era un firme defensor de la utilidad de los primeros desarrollos de esta tecnología, Hawking no dejó de lado su preocupación por la creación de sistemas de inteligencia artificial capaces de igualar o, en el peor de los casos, superar las capacidades intelectuales que poseen los humanos.
Sobre Hawking
Como es bien conocido, Hawking sufría de esclerosis lateral amiotrófica (ELA). Desde sus 21 años que padecía esta enfermadad lo que hizo que se comunicara a través de un sistema informático que reconocía ciertos gestos y movimientos de su rostro.
Luego, este sistema predecía lo que éste quería decir y procedía a redactar los textos, para luego ser leídos por una voz ‘bastante’ robótica (con evidente presencia de inteligencia artificial) que el científico se negó a cambiar a lo largo de los años.
Aún así, Hawking recalcó sus criticas a la inteligencia artificial, en mayo del 2015, en una conferencia en Londres. Allí predijo que los ordenadores superarían a los seres humanos en los próximos 100 años gracias a la implementación de esta tecnología.
Así mismo aconsejó a la humanidad de conseguir ordenadores que tuvieran objetivos alineados con los suyos.
Los puntos de vista
En distintas conferencias, entrevistas y hasta foros Hawking siguió compartiendo su ideología acerca del crecimiento de esta tendencia y explicaba que, si las máquinas se desarrollaban al punto de ser capaces de producir todo lo que el hombre necesita, el mundo sería dependiente de esta fuente de producción para el bienestar de la humanidad.
El científico mostró su preocupación y miedo ante esta situación, en especial porque pensaba que podía generarse una mayoría miserablemente pobre frente a propietarios de máquinas de este nivel, que podrían agruparse con éxito contra la redistribución del bienestar.
Visto desde una perspectiva como esa puede ser alarmante, aun así lo más probable es que una predicción como esta podría verse manifestadas en un par de décadas más, lo que no quita para nada lo alarmante de esta teoría.
Además, Hawking no es el único que ha tomado esta postura acerca del tema pues otras figuras del sector también han mostrado su desaprobación hacia el creciente desarrollo de la inteligencia artificial.
Uno de ellos es el empresario Elon Musk, CEO de grandes compañías como Tesla Motors, Space X, The Boring Company o Neuralink.
Los argumentos llegan tanto al extremo, que incluso han llegado a considerar la posibilidad del desencadenamiento de una tercera guerra mundial a raíz del crecimiento de esta tecnología.