Los murciélagos pueden poseer las alas más sofisticadas en el reino animal con más de 40 articulaciones que le permiten una tremenda agilidad durante el vuelo haciendo más fácil y rápida la captura de sus presas.
Sus capacidades han llamado la atención de científicos que intentando simular lo que son los insectos y otras aves han desarrollado una variedad de robots voladores. Sin embargo, los murciélagos han resultado con un éxito limitado debido a la complejidad articular de sus alas.
El Bat Bot o B2, es el primer robot construido con las características de este mamífero volador, el cuál puede girar, golpear y volar. Su creación parte de los ensayos y errores que anteriormente se realizaron, intentando diseñar prototipos muy grandes para conseguir lograr el vuelo y en ellos se dieron cuenta de las falencias que tenían y pudieron arreglar cada detalle para cumplir con el objetivo deseado.
La magia radicaba en el tipo de ala y articulaciones que incorporaron en los hombros, codos y muñeca de Bat Bot, quien es dueño de unas alas delgadas y elásticas que al ser flexible se llena de aire y le permite generar una elevación mayor.
Las alas de Bat Bot están hechas de huesos de fibra de carbono y plástico impreso 3D, todo cubierto con una piel suave, duradera, ultra fina, a base de silicona de sólo 56 micrones de espesor. Para poder comparar ello, es importante saber que el pelo humano tiene un espesor de 100 micras en una persona promedio.
En la práctica, el robot batió sus alas hasta 10 veces por segundo utilizando micro-motores en su columna vertebral. Su peso para permitir un vuelo ligero es de 93 gramos y tiene una envergadura de aproximadamente 47 centímetros, medidas similares a las de los murciélagos de fruta egipcios.
La velocidad que alcanzó tuvo un promedio de 5,6 metros por segundo dando vueltas y piruetas con diferentes niveles de rapidez. Principalmente lo que pudieron resolver con las pruebas es que este tipo de robot permite una interacción mejor con los humanos, es menos chocante ver algo así que un drones convencional.
La naturaleza más segura y más ágil que tiene el Bat Bot podría permitir sumar una amplia gama de aplicaciones. Por ejemplo, podrían servir como robots aéreos ayudando en casa, en los hospitales con la búsqueda rápida de objetos pequeños para los pacientes, en la retransmisión de audio y video de varios lugares a distancia funcionando como cámara o vigilante de mascotas, muchas funciones que se podrían aprovechar.
Otra aplicación potencial para los Bat Bots es participar dentro de áreas como la construcción ya que en ella existe una constante solicitud de soluciones para revisar los avances de cada obra y éstas nuevas alternativas de robótica ofrecen seguimiento por ejemplo de un edificio y verificar si está construido de la manera correcta solamente volando a su alrededor y captando imágenes para compararlas con los planos.
En Chile, sabemos de desastres naturales y la utilización de drones ha ayudado a conocer las situaciones rápidamente por medio de sobrevuelos. Esta función también la tienen los Bat Bots, ya que se puede equipar como un robot aéreo incluyendo detector de radiación, un sistema de cámara 3D, sensores de temperatura y humedad que colaborarían con el rastreo de personas, revisión de espacios pequeños, derrumbes, entre otros.
Aún los ensayos no logran descubrir todos los secretos del vuelo de los murciélagos, ni tampoco que Bat Bot pueda transportar objetos pesados, pero cada día se acercan más esperanzados en que su estructura podrá colaborar a ver la tierra desde las alturas con una mayor precisión.