Así mismo la creación de robots humanoides se ha convertido en una tendencia importante para seguir integrando la ayuda tecnológica en las labores diarias de los seres humanos, por lo que lo vemos presente en los hogares, el trabajo, sitios de entretención, entre otros.
Camareros, recepcionistas, enfermeros o amas de casas son tan solo algunas de las presentaciones en las que podemos ver la presencia de robot dentro del mundo y conviviendo con los humanos haciendo valer la técnica de la robótica asistencial.
La idea es que estas máquinas sean seguras y no puedan causarle ningún tipo de daño a las personas, por esta razón los expertos en el tema han optado por diseñar novedosas estructuras robóticas utilizando materiales blandos y flexibles.
En este sentido, varios investigadores y científicos se están encargando de elaborar robots que cumplan con estas características que los incluyen dentro de la categoría de robots blandos o “soft robotics” en inglés y que sean capaces de generar una experiencia más humana y real con las personas.
¿Es apropiado que coexista este tipo de robots?
Esta idea es sumamente acertada, en especial si consideramos que (usualmente) estos robots suelen ser creados para colaborar y ayudar a personas que lo necesitan, bien sea en hospitales, asilos de ancianos, hogares, entre otros, por lo que generar una interacción más real sumará a la comodidad del usuario.
A propósito de esta tendencia, el año pasado, en octubre, tuvo lugar el mayor Congreso Mundial de Robótica, en la ciudad de Madrid, conocido como IROS 2018 y en el que se enfatizó en el tema de los famosos robots blandos dejando el espacio para conocer muchas propuestas que aplican esta tendencia.
En el evento resaltaron muchos nombres y proyectos que más pronto que tarde estarán disponibles en el mercado, todos con un enfoque positivo y con el objetivo de ayudar en la realización de tareas cotidianas y sirviendo de ayuda para quienes necesiten atención constante.
Más de 1.200 expertos fueron participantes en el IROS 2018, con la intervención de algunos de los mayores exponentes mundiales en cuanto a la robótica blanda que sacaron a relucir algunas de sus propuestas como la Italiana Cecilia Laschi, creadora de un pulpo robótico completamente blando o el alemán Helmut Hauser, quien trabaja en computación morfológica también enfocado en temas de control de robótica blanda.
Algunos destacados
Entre otros destacados, también se contó con la presencia de Robotics Lab quien acudió con su famoso humanoide TEO para labores de investigación y con dos prototipos robóticos de cuello blando y flexible elaborados por este laboratorio científico.
La investigadora Concha Monje, también asistió al evento con otros de sus ejemplares más conocidos como lo es la versión mini de Maggie, un robot social empleado en tareas de rehabilitación de trastornos neuronales, o Amor un brazo robótico asistencial para cocinas adaptadas a personas discapacitadas.
También dijeron presente los famosos humanoides NAO y Pepper, conocidos por sus capacidades sociales y de interacción, así como de robots submarinos, de inspección, infraestructura, rescate, vehículos autónomos y más.