El bullying es uno de los temas que más preocupa a los padres, profesores y estudiantes, puesto que no sólo el afecta el rendimiento académico sino también deja huellas psicológicas difíciles de reparar en la vida adolescente y hasta en la etapa adulta.
En varios países se han conformado redes y programas de apoyo para detener el bullying, pero pocos han apostado por la tecnología, lo cual puede ser un complemento para detener el abuso y matonaje en niños y adolescentes.
Es así como unos jóvenes entre 15 y 17 años de edad de la Escuela Subiré ubicada en la ciudad de Guadalajara en México, lograron concretar una solución a este problema gracias a su creatividad e interés en la tecnología de última generación.
La solución
Se trata de un dron antibullying, un dispositivo que tiene un plan de vuelo basado en el mapa de la escuela, con horarios, zonas de riesgo, un botón de pánico y un sistema de monitoreo de imágenes.
El dispositivo cumple la misión de vigilar todo lo que sucede en la escuela, es decir, capta en imágenes las situaciones consideradas violentas, como peleas, insultos e incluso el tráfico de drogas y la posición de armas.
Los estudiantes indicaron que el principal objetivo del dron es vigilar los llamados «puntos ciegos» que toda escuela del mundo posee, como los pasillos, patios, estacionamientos o cualquier lugar que no cuenta con la supervisión del personal del establecimiento educacional. Así lo manifestó Carlos al medio Excelsior de México, uno de los estudiantes que trabajaron en el prototipo:
“Hay ciertos puntos ciegos que algunos llegan a aprovechar; por eso queremos utilizar el dron, ya que una vista aérea puede ayudar muchísimo para detectar este tipo de casos. En algunos lugares no podemos acceder y todavía se puede utilizar el botón de pánico para alertar a los profesores y que se vaya en la dirección que está marcando la señal».
Además de entregar una solución efectiva al problema del bullying en el sistema educativo mexicano, los profesores también valoran la iniciativa de los jóvenes quienes están aplicando sus conocimientos de ingeniería, tecnología y matemáticas.
El rector de la Escuela Subiré, Julio César Saucedo, indicó que este tipo de proyectos también ha permitido que los jóvenes logren trabajar en equipo en pos de un proyecto en común, más aún con esta innovadora idea que puede ser replicada en otras escuelas del mundo.
Aquí una explicación más detallada del trabajo de estos adolescentes: